16 de marzo de 2009

filosofía mundana (mi madre)

Querido lunes,
hoy hablaré de mi madre. Lo prometí un día y a estas horas en Berlin es negra noche tintada de frío.
Cierto, aun ando por aquí y es que estoy enamorada de esta ciudad. Es mi ciudad tirita. HAy chicos tirita y ahora he descubierto que también hay ciudades tiritas que curan las heridas que traes vengas de donde vengas.

El tema era mi madre y es que en estos días de soledad acompañada de galletas y vasos de leche caliente la hecho de menos.

Mi madre es una actriz de la vida y es que lo suyo es de cine.
Podría decir que es de circo pero quizá el séptimo arte es su mejor representante ya que es mas de aprenderse guiones que hacer de saltimbanqui.

Yo con ella me muero desde el día en que una lágrima suya baño mi recien estrenado rostro.

Me moría por las mañanas de los domingos cuando entraba pegándome gritos a las doce, subía la persiana y decía "vamos a meditar a ver que tarea transcendental nos espera en palacio" y se metía en mi cama hasta que se cansaba.

Me muero cuando la llamo enferma y ella me dice "ponte el termómetro y en lo que tardo a venir calienta un par de tazas de caldo y enciende el DVD" y le pregunto "mamá, ¿tú nunca te pones enferma?" y ella me suelta una de sus frases como "mala hierba nunca muere y cuelga".

Me muero cuando sabe que Al a vuelto a dejarme un puzzle de cien millones de piezas dentro de mí y ella despues de ver las correspondientes series empieza una batalla de cojines en el sofá que siempre pierdo diciendo "enemigo no me mate, no me mate que me rindo" y ella se va a la cocina toda victoriosa a preparar palomitas.

Me muero cuando me dice que nunca voy a verla y que por eso ha pegado mi foto al mocho


Me muero cuando quiere llamar a su madre y llama a su hermana y se queda hablando media hora hasta que suelta "si bueno me parece muy bien pero yo quería hablar con mamá!" y cuelga.


Y es que con ella te mueres, te mueres de la risa y si no, te remata.

Yo, por si acaso siempre me rindo antes de que me cojan agujetas.

Me voy a escuchar a un chico de éste barrio berlinés que toca en el bar de la esquina con una guitarra acústica que me tatuó sus notas en la médula.

1 comentario:

Ayla dijo...

Ets molt gran
:)