20 de mayo de 2010

filosofia mundana (criaturas)

Querido jueves,
este final de semana ha sido de reflexión. La verdad es que aún estoy un poco descolocada por como ha ido todo.
He revisado mi entrada anterior y la verdad es que queda palpable mi grado de desconcierto delante de esta situación.

No hay mes que no me repita que mi reloj biológico no va y cada vez que cojo a Amaya o juego con mi sobrino Pol me doy más cuenta de que yo no estoy hecha para esto.

El martes, después del test, era la mujer más feliz del mundo pero desgraciadamente me tuve que dar de bruces contra la realidad cuando miré fijamente a los ojos de Al.

- Pues a mí me hacía ilusión- me dijo sentado en el sofá cogiendo un cojín y con cara de niño pequeño.
-¿Pero que me estás diciendo?- le dije en tono de broma porque pensaba que lo suyo había sido eso, meramente una broma para relajar el ambiente.
- La verdad te estoy diciendo. Tenemos buena edad, trabajo estable, tú tienes piso de propiedad y bueno, yo te quiero como madre de mis hijos y cuando me has llamado tan alarmada he pensado que éramos una gilipollas pero esperando el resultado me he dado cuenta de que eran mayores las ganas de que saliera el "si" y no el "no". En otro momento me hubiese asustado pero ahora no, ahora sé lo que quiero y eso eres tú.
- Estás loco. ¡Yo nunca voy a ser madre!- le grité mientras me levantaba para irme a duchar.

No volvimos a hablar del tema hasta hoy que Lúa me ha traído a Pol para que lo cuidara un par de horas mientras ella, embarazada de 7 meses y poco, iba a comprar y a buscar no sé qué cosas.

Al me ha llamado y cuando Pol lo ha oído por el teléfono ha empezado a gritar "oh, Abet, zi, Abet zi, cotxe brum brum" así que Al ha venido a verle.
Pol tiene 3 años y está loco con un coche que le regaló Al para su cumpleaños y cada vez que se ven no sé quien es más crío.
Se han puesto en el suelo del comedor y han desmontado el baúl de juguetes que tengo para estos casos (mi hermana, que es muy previsora, me hizo ir llenando un baúl con los juguetes que se dejara Pol en casa y así cuando venía no tenía que traerse nada. Esta decisión la tomó el día que le dije que Pol, con dos años, me pintaba las paredes con el perfilador de ojos).

Lua se ha alargado más de lo esperado y hemos tenido que darle la cena. Este niño come demasiado. yo ya se lo tengo dicho a su madre pero me dice que eso son genes del padre y que ya es normal. Después quería seguir jugando con Al pero entonces era Al el que ya no podía y nos hemos sentado en el sofá con Pol enmedio. "pozem pocoyó zi?zizplaaaau" y como a las ocho y media no dan nada decente en la tele hemos puesto un DVD de pocoyó que tengo que reconocer que hasta yo me río. Los capítulos son de 7 minutos y al segundo capítulo Pol ya estaba con la cabeza en mi regazo y los pies encima de Al y entonces ha sacado el tema.

-¿De verdad que no te gustaría que fuese nuestro?
- No lo sé.

Y es la verdad, ahora me ha infundido la duda de todo. Supongo que con tanta criatura a mi alrededor es normal que piense todo el día en Pol, Amaya, la pequeña Laura que está en camino, en el niño de la compañera del trabajo, en las crías del cuarto...

No hay comentarios: